Rubén Zabala, M.A.
EL DÍA DEL CACIQUE ENRIQUILLO.
Este 27 de Septiembre se conmemora el Día del Cacique Enriquillo, quien fue una de las figuras más refulgentes del indigenismo y de la resistencia de su raza en contra de la conquista europea del nuevo mundo.
Enriquillo nació y creció en tierras del Jaragua, y fue adoctrinado por monjes católicos, y ya grande, fue dado al encomendero Francisco Valenzuela quien lo trajo a vivir a su hato en la Higuera, un territorio rural ubicado en lo que fue el cacicazgo del Maguana, en lo que es hoy el Distrito Municipal de Hato del Padre, municipio de San Juan de la Maguana.
El papel de Enriquillo en la resistencia aborigen fue fundamental. Se le considera el primer guerrillero del Continente Americano por su valor de enfrentar el poder imperial ibérico que se había adueñado de las tierras del nuevo mundo, con patente del catolicismo cristiano, tras las bulas del papa Alejandro VI , que en el nombre de Dios, legalizan tan cruenta empresa.
Fue en tierra sanjuanera donde este valiente taíno va a articular su pequeño ejército con el que iniciará su aventura revolucionaria, preñado más de valor que de posibilidades reales de derrotar al enemigo invasor que dada su superioridad militar en menos de una década se había apoderado del espacio insular.
Enriquillo logró en la práctica derrotar a los soldados españoles, quienes tuvieron que capitular con él. Ello evidencia su gran arrojo y conocimiento del arte de la guerra.
Los méritos de Enriquillo son varios: estratega de la guerra de guerrillas, líder político, cabeza de la resistencia aborigen en el siglo XVI, y defensor de su vapuleada raza frente al dominio hispánico.
Fue un gran concertador al lograr sumar a su movimiento a negros que también habían huido inconformes con la explotación irracional a que eran sometidos.
Enriquillo colmó su paciencia cuando su mujer Mencía fue abusada sexualmente por un hijo del dueño del hato. Buscó justicia por la vía institucional y se la negaron y decidió en venganza levantarse en armas.
Considero exageradas y desproporcionadas las críticas a este personaje que ha formulado un segmento de la intelectualidad dominicana, porque no toman en cuenta el contexto sociopolítico de la época en que le correspondió vivir a este héroe indígena.
Por eso es injusto, equivocado y antihistórico llamarlo “ídolo de barro”. No puede ser un ídolo de barro un aborigen que se alza en las montañas y enfrenta gallardamente la política de exterminio y desculturación que imponían los dominadores ibéricos.
Este 27 de Septiembre, consagrado por Ley del Congreso Nacional, como Día de Enriquillo recordemos el valor de este contestatario del imperio español, creador de la Guerra de Guerrillas.
El autor es Profesor y periodista.
Enriquillo nació y creció en tierras del Jaragua, y fue adoctrinado por monjes católicos, y ya grande, fue dado al encomendero Francisco Valenzuela quien lo trajo a vivir a su hato en la Higuera, un territorio rural ubicado en lo que fue el cacicazgo del Maguana, en lo que es hoy el Distrito Municipal de Hato del Padre, municipio de San Juan de la Maguana.
El papel de Enriquillo en la resistencia aborigen fue fundamental. Se le considera el primer guerrillero del Continente Americano por su valor de enfrentar el poder imperial ibérico que se había adueñado de las tierras del nuevo mundo, con patente del catolicismo cristiano, tras las bulas del papa Alejandro VI , que en el nombre de Dios, legalizan tan cruenta empresa.
Fue en tierra sanjuanera donde este valiente taíno va a articular su pequeño ejército con el que iniciará su aventura revolucionaria, preñado más de valor que de posibilidades reales de derrotar al enemigo invasor que dada su superioridad militar en menos de una década se había apoderado del espacio insular.
Enriquillo logró en la práctica derrotar a los soldados españoles, quienes tuvieron que capitular con él. Ello evidencia su gran arrojo y conocimiento del arte de la guerra.
Los méritos de Enriquillo son varios: estratega de la guerra de guerrillas, líder político, cabeza de la resistencia aborigen en el siglo XVI, y defensor de su vapuleada raza frente al dominio hispánico.
Fue un gran concertador al lograr sumar a su movimiento a negros que también habían huido inconformes con la explotación irracional a que eran sometidos.
Enriquillo colmó su paciencia cuando su mujer Mencía fue abusada sexualmente por un hijo del dueño del hato. Buscó justicia por la vía institucional y se la negaron y decidió en venganza levantarse en armas.
Considero exageradas y desproporcionadas las críticas a este personaje que ha formulado un segmento de la intelectualidad dominicana, porque no toman en cuenta el contexto sociopolítico de la época en que le correspondió vivir a este héroe indígena.
Por eso es injusto, equivocado y antihistórico llamarlo “ídolo de barro”. No puede ser un ídolo de barro un aborigen que se alza en las montañas y enfrenta gallardamente la política de exterminio y desculturación que imponían los dominadores ibéricos.
Este 27 de Septiembre, consagrado por Ley del Congreso Nacional, como Día de Enriquillo recordemos el valor de este contestatario del imperio español, creador de la Guerra de Guerrillas.
El autor es Profesor y periodista.
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MAESTRO ZABALA MORETA,GRACIAS POR ESTE ESTE ARTICULO MUY ACERTADO SOBRE NUESTRO CACIQUE ENRIQUILLO.EN ESTE ARTICULO QUE A MI ENTENDER NO TIENE NINGUN DESPERDICIO,PONE MUY EN ALTO UNA DE LAS FIGURAS MAS IMPORTANTE DE NUESTRA MALTRATADA Y EXTERMINADA RAZA ABORIGEN.ME PARECE EXCELENTE PARA SER USADOS EN NUESTRAS ESCUELAS Y LICEOS EN EL AREA DE CIENCIAS SOCIALES.
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