AEIH y FAI llaman a paralizar el dispendio de fondos públicos en botellas y nominillas

SANTO DOMINGO.- En momentos en que el Gobierno gestiona fondos para encarar los desequilibrios presupuestarios, la Asociación de Empresas Industriales de Herrera (AEIH) y la Federación de Asociaciones Industriales (FAI) hicieron un llamado para poner fin al dispendio de recursos públicos y reestructurar el gasto en función de las necesidades del país.

Las entidades empresariales consideraron que frente a un déficit en las cuentas públicas que suma miles de millones de pesos, deben ser eliminadas las botellas, el abultamiento de la nómina pública, el barrilito de los legisladores y las nominillas de los congresistas para beneficios familiares.

Advirtieron que el país se encuentra en una situación difícil por la merma de las recaudaciones fiscales, razón que debe llevar al Gobierno a un gasto más racional basado en el estímulo de la producción, el aumento de las exportaciones y la creación de empleos productivos.

Indicaron que, sin embargo, para lograr esa meta se requiere una reorganización de las asignaciones presupuestarias, a fin de limitar el gasto en aquellas áreas que no contribuyen con la competitividad.

En ese sentido, las organizaciones empresariales sugirieron una reunión de emergencia entre las áreas de planificación y hacienda del Gobierno a fin de estructurar un plan de reasignación de recursos en función de la creación de empleos productivos, incremento de la oferta exportable y mejoría de la producción.

Deploraron que mientras faltan recursos para cumplir los acuerdos de la cumbre convocada por el presidente Fernández –en materia de creación de empleos- las botellas siguen abundando en el Estado y no hay quien las frene.

Es vergonzoso –advirtieron- que por falta de contrapartidas mínimas haya programas de empleos paralizados, mientras los senadores gastan poco más de 17 millones de pesos mensuales en nóminas para beneficiar a parientes.

La AEIH y la FAI también rechazaron las declaraciones politiqueras que han salido en defensa de personas despedidas de la Corporación de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) que sólo servían para abultar la nómina de esa entidad.