NUEVA YORK._ Lashaun Armstrong, una madre afroamericana se suicidó ayer miércoles poco antes de las 8:00 de la noche, junto tres de sus cuatro hijos, conduciendo su auto a las aguas del río Hudson en el área de Newburgh, donde perecieron, pero uno pudo salvarse saliendo por una ventanilla del carro.
La tragedia ha conmovido a todo el estado y ha recibido amplia difusión en medios anglófonos y latinos locales y nacionales. La suicida tenía 25 años de edad y habría dicho a algunos de sus parientes que no quería seguir viviendo. La madre condujo el vehículo por la rampa que separa las profundas y caudalosas aguas del Hudson, luego de una pelea de violencia doméstica en su casa. Su hijo, Michael Vatter Lashaun, luego de salir por la ventanilla corrió en busca de ayuda y encontró un transeúnte que lo llevó con varios bomberos a quienes les relató lo ocurrido.
Apenas podía hablar, dijeron los oficiales. El carro manejado por la madre suicida, se hundió unos 10 pies en el agua y las autoridades dijeron que los ocupantes, ella y sus tres hijos (dos varones y una hembra), murieron asfixiados.
Los niños ahogados son Landon y Pierre Lance de 5 y 2 años de edad y Lainaina Pierre de 11 meses. Un pariente de la mujer había llamado a la policía para informar sobre el incidente doméstico entre la madre y el padre de los tres niños más pequeños.
El alcalde de Newburgh dijo sobre la tragedia que los residentes de la ciudad, tienen una tristeza abrumadora y quieren saber el porqué sucedió el hecho. Equipos especiales, incluyendo un barco rescataron el vehículo y los cadáveres.
Policías, bomberos, buzos y un helicóptero participaron también en el rescate.
Después de una hora de búsqueda, dijo el jefe de los bomberos, hallaron el vehículo a unos 25 metros de la orilla del río. Una grúa de remolque fue utilizada para sacar el vehículo del agua. Se dijo que la madre y sus hijos, vivían a pocas cuadras de la trágica escena.
El edil explicó que en esta época, esa parte del río es muy tranquila, contrario al verano que es visitada por miles de personas, por lo que es difícil de todos modos, que se pudiera hacer algo. Algunos allegados y vecinos de la madre, lanzaron flores al río y otros dejaron peluches en la rampa para recordar a los menores.
El poblado de Newburgh, con 30.000 habitantes está situado en la orilla occidental del río Hudson, un cauce que corre hacia el Sur a través del estado y divide a Nueva York y New Jersey. Una tragedia similar ocurrió en el 2006 a unos 20 kilómetros en el Sur de la ciudad.
La tragedia ha conmovido a todo el estado y ha recibido amplia difusión en medios anglófonos y latinos locales y nacionales. La suicida tenía 25 años de edad y habría dicho a algunos de sus parientes que no quería seguir viviendo. La madre condujo el vehículo por la rampa que separa las profundas y caudalosas aguas del Hudson, luego de una pelea de violencia doméstica en su casa. Su hijo, Michael Vatter Lashaun, luego de salir por la ventanilla corrió en busca de ayuda y encontró un transeúnte que lo llevó con varios bomberos a quienes les relató lo ocurrido.
Apenas podía hablar, dijeron los oficiales. El carro manejado por la madre suicida, se hundió unos 10 pies en el agua y las autoridades dijeron que los ocupantes, ella y sus tres hijos (dos varones y una hembra), murieron asfixiados.
Los niños ahogados son Landon y Pierre Lance de 5 y 2 años de edad y Lainaina Pierre de 11 meses. Un pariente de la mujer había llamado a la policía para informar sobre el incidente doméstico entre la madre y el padre de los tres niños más pequeños.
El alcalde de Newburgh dijo sobre la tragedia que los residentes de la ciudad, tienen una tristeza abrumadora y quieren saber el porqué sucedió el hecho. Equipos especiales, incluyendo un barco rescataron el vehículo y los cadáveres.
Policías, bomberos, buzos y un helicóptero participaron también en el rescate.
Después de una hora de búsqueda, dijo el jefe de los bomberos, hallaron el vehículo a unos 25 metros de la orilla del río. Una grúa de remolque fue utilizada para sacar el vehículo del agua. Se dijo que la madre y sus hijos, vivían a pocas cuadras de la trágica escena.
El edil explicó que en esta época, esa parte del río es muy tranquila, contrario al verano que es visitada por miles de personas, por lo que es difícil de todos modos, que se pudiera hacer algo. Algunos allegados y vecinos de la madre, lanzaron flores al río y otros dejaron peluches en la rampa para recordar a los menores.
El poblado de Newburgh, con 30.000 habitantes está situado en la orilla occidental del río Hudson, un cauce que corre hacia el Sur a través del estado y divide a Nueva York y New Jersey. Una tragedia similar ocurrió en el 2006 a unos 20 kilómetros en el Sur de la ciudad.
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