HATO MAYOR.-Las autoridades judiciales y policiales de Hato Mayor, apresaron la tarde de ayer domingo a una mujer que alumbró la madrugada del sábado a una criatura de sexo femenino, la habría estrangulado y luego tiró a un retrete con fines de matar y desaparecer el cuerpo.
Para determinar la veracidad de rumores que fueron puesto a circular por vecinos que dijeron que la niña había nacido viva y gritó y que llegó hasta los oídos del fiscal, Manuel Emilio Santana, un juez de la instrucción ordenó el allanamiento de la vivienda y romper el retrete, y ya en su interior, casi putrefacto, estaba el cuerpecito de la infante.
La mujer que habría sido denunciada por vecinos, fue identificada como, Corina Camacho González, 32 años, , residente en la calle Alelí del sector Villa Navarro, al norte de Hato Mayor, quien ahora alega que la niña nació muerta.
Para extraer el cuerpo de la criatura del retrete, se solicitó al cuerpo de Bomberos una brigada, quienes descendieron a la profundidad y extrajeron de entre los excrementos y pestilente agua y orina, el cadáver.
Tras ser extraído el cuerpecito, las autoridades ordenaron llevarlo a la morgue del hospital Leopoldo Martínez y de ahí fue enviado a Patología Forenses, en San Pedro de Macorís, para determinar la real causa de muerte.
En el operativo que dio al traste con el apresamiento de la infanticida y el rescate del cadáver participó la fiscal adjunta, Kenia Romero, el médico legista, Santini Calderón Gastón, así como miembros del Departamento de Investigaciones Criminales, que dirige el mayor, Leonel Taveras Constanzo, así como miembros de los Bomberos, la Cruz Roja y la Defensa Civil.
Un parte policial, entregado a los medios de comunicación local, del cual este medio tiene copia, revela que la mujer admitió haber introducido la criatura que alumbró al hoyo de sanitario del patio de su casa, porque alegadamente le misma había nacido muerta.
Sin embargo la versión de la supuesta infanticida, queda en entredicho, tras el médico legista, Santini Calderón Gastón, certificar que la criatura murió por asfixia por ahogamiento macerado fétido y enfisema.
Consideró la muerte de infanticidio, por lo que recomendó su cuerpo sea llevado al Instituto de Ciencias Forenses (INACIF).
La supuesta infanticida fue detenida y llevada al cuartel policial de la 40ta Compañía de la Policía Nacional de esta ciudad.
Este medio se enteró por otro lado que la supuesta infanticida era madre de unos seis hijos que había procreado con distintos hombres y que la víctima sería la número siete.
LA NIÑA GRITÓ AL NACER
Vecinos que pidieron el anonimato y que habrían escuchado la criatura gritar al momento de nacer, llegaron a decir durante el operativo, que la mujer no quería parir más, porque supuestamente el padre de la barriga lo negaba.
“La criatura que nació gritó y eso ocurrió en la madrugada del sábado, gritó varias veces y luego cesaron los gritos, escuchándose después una puerta que estaba siendo cerrada", dijo un vecinos que pidió reserva de su nombre.
La tragedia ha conmovido a Hato Mayor, que está pidiendo un castigo aleccionador a la mujer, por haber lanzado el cuerpo de su propia hija a un hoyo de sanitario.
Para determinar la veracidad de rumores que fueron puesto a circular por vecinos que dijeron que la niña había nacido viva y gritó y que llegó hasta los oídos del fiscal, Manuel Emilio Santana, un juez de la instrucción ordenó el allanamiento de la vivienda y romper el retrete, y ya en su interior, casi putrefacto, estaba el cuerpecito de la infante.
La mujer que habría sido denunciada por vecinos, fue identificada como, Corina Camacho González, 32 años, , residente en la calle Alelí del sector Villa Navarro, al norte de Hato Mayor, quien ahora alega que la niña nació muerta.
Para extraer el cuerpo de la criatura del retrete, se solicitó al cuerpo de Bomberos una brigada, quienes descendieron a la profundidad y extrajeron de entre los excrementos y pestilente agua y orina, el cadáver.
Tras ser extraído el cuerpecito, las autoridades ordenaron llevarlo a la morgue del hospital Leopoldo Martínez y de ahí fue enviado a Patología Forenses, en San Pedro de Macorís, para determinar la real causa de muerte.
En el operativo que dio al traste con el apresamiento de la infanticida y el rescate del cadáver participó la fiscal adjunta, Kenia Romero, el médico legista, Santini Calderón Gastón, así como miembros del Departamento de Investigaciones Criminales, que dirige el mayor, Leonel Taveras Constanzo, así como miembros de los Bomberos, la Cruz Roja y la Defensa Civil.
Un parte policial, entregado a los medios de comunicación local, del cual este medio tiene copia, revela que la mujer admitió haber introducido la criatura que alumbró al hoyo de sanitario del patio de su casa, porque alegadamente le misma había nacido muerta.
Sin embargo la versión de la supuesta infanticida, queda en entredicho, tras el médico legista, Santini Calderón Gastón, certificar que la criatura murió por asfixia por ahogamiento macerado fétido y enfisema.
Consideró la muerte de infanticidio, por lo que recomendó su cuerpo sea llevado al Instituto de Ciencias Forenses (INACIF).
La supuesta infanticida fue detenida y llevada al cuartel policial de la 40ta Compañía de la Policía Nacional de esta ciudad.
Este medio se enteró por otro lado que la supuesta infanticida era madre de unos seis hijos que había procreado con distintos hombres y que la víctima sería la número siete.
LA NIÑA GRITÓ AL NACER
Vecinos que pidieron el anonimato y que habrían escuchado la criatura gritar al momento de nacer, llegaron a decir durante el operativo, que la mujer no quería parir más, porque supuestamente el padre de la barriga lo negaba.
“La criatura que nació gritó y eso ocurrió en la madrugada del sábado, gritó varias veces y luego cesaron los gritos, escuchándose después una puerta que estaba siendo cerrada", dijo un vecinos que pidió reserva de su nombre.
La tragedia ha conmovido a Hato Mayor, que está pidiendo un castigo aleccionador a la mujer, por haber lanzado el cuerpo de su propia hija a un hoyo de sanitario.
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