Elevados de la 27 y Kennedy: entre indigentes y abandono.

26/08/2011.
1:10 AM.

SANTO DOMINGO.- El descuido de los elevados y pasos a desnivel de las avenidas 27 de Febrero y John F. Kennedy es evidente. La falta de mantenimiento se refleja en el mal estado, o la ausencia, en muchos casos, de las verjas perimetrales que cercan el área debajo.

La falta de las verjas favorece la acumulación de desperdicios y convierte a las isletas en espacios utilizados por indigentes.

En un recorrido realizado a partir de la intersección de la avenida 27 de Febrero con Leopoldo Navarro se pudo observar que aunque las mallas ciclónicas están intactas en más de un 90 por ciento, las puertas que dan acceso al área que en teoría debe servir como jardín no tienen candados que protejan su interior, que ayer estaba lleno de basura.

Al seguir avanzando hacia la Rocco Cochía, los bordes de las isletas están sin pintar y las verjas están rotas, al igual que en la intersección con Doctor Delgado, donde se han robado las tapas de los cuatro registros que suplen de electricidad a los semáforos.

Otro de los problemas de los elevados es el de las filtraciones que se producen, cuando llueve, por el mal funcionamiento del drenaje. Incluso, pequeñas matas de helecho nacen en los tubos que sirven de desagüe, por la tierra acumulada, y florecen con el agua que baja por ellos.

A partir de las calles Francisco Henríquez y Juan de Morfa, en las inmediaciones de San Carlos, hasta llegar a la popular avenida Duarte, se empieza a ver trapos viejos colgados y cartones que como casuchas los indigentes han construido para vivir. Máxima Reyes es uno de los tantos ejemplos.

La mujer, que lleva mes y medio viviendo a la intemperie, dice que ha hecho de la calle su hogar porque no tiene los recursos para alquilar una vivienda. Reyes se queja de que cada viernes brigadas del Ayuntamiento destruyen su “casa” y tiene que recoger desperdicios para reconstruirla nueva vez.

Falta vigilancia para evitar el desorden

Si de la avenida John F. Kennedy se trata, la situación es la misma. Los mendigos también han ocupado gran parte de estas áreas por la falta de vigilancia. En esta importante vía la falta de las vallas es más notoria. Un lado completo del tramo que va desde las avenidas Lope de Vega hasta la Tiradentes no está cercado.