El Tiempo es Oro

10/07/2012. 

Por: Gilberto Mateo D Los Santos. 

Ha quedado demostrado que con el pasar de los años, los meses, los días, las horas, los minutos y los segundos, todo se somete a transformación y precisamente se pone de manifiesto aquel pensamiento histórico del connotado filósofo de nombre Heráclito.

Hacemos esta reflexión en vista de que vemos que ha veces no sabemos racionalizar el tiempo en cosas fructíferas y de beneficios; es sumamente lamentable ver como desaprovechamos el tiempo, muchas veces con todas las herramientas para invertirlo en cosas que en el futuro se pudieran reflejar para bien, no solo para bien personal, sino, para bien colectivo y de de una u otra forma, la sociedad obtenga beneficios de ese tiempo que bien invertimos.

Una etapa maravillosa que tienen las personas para invertir bien el tiempo, es la tan apreciada juventud, muchas veces no tomamos en cuenta que la juventud se va con el tiempo, mirar atrás resulta muy lamentable para quienes no aprovechamos bien ese tiempo de la vida.

Esta reflexión se corresponde también, al convivir a diario ese desperdicio de tiempo que veo en muchas personas, en su mayoría jóvenes que tienen la vocación, el talento y la fuerza suficiente para hacer las cosas y desarrollarse en cualquier actividad que se propongan, toda vez que todo es posible en la vida.

Me apena mucho este panorama, es un cuadro que dan hasta ganas de llorar, pienso que no estamos bien en términos de ocupar el tiempo en actividades de carácter positivo, y ese desperdicio de tiempo lo podemos apreciar en nuestros jóvenes; y nadie venga con el famoso dicho popular de que “no hay nada que hacer” y por eso se colocan en las esquinas, en las calles y en los lugares que nos acercan al maldito precipicio y caminos oscuros.

Nuestros barrios, ciudades, campos y comunidades, están llenas de talentos que no se están desarrollando, jóvenes brillantes, hombres y mujeres con todas las condiciones para triunfar en la vida, pero lamentablemente, no se quieren decidir a cambiar sus vidas, están rezagados, desaprovechando el tiempo en cosas sin fundamentos de éxito y superación.

Esta situación le propina una estocada a la sociedad, ya basta, queremos jóvenes en camino a la superación, ansiosos de lograr metas, saber hacia donde quieren llegar; con ideas precisas y coherentes de la facultad que le ha proporcionado la vida de tener fuerza y tiempo a su favor.

Ojalá que termine ya el desperdicio del tiempo, es hora de sacudirse, dejemos de malgastar nuestros días, aportemos a nuestra sociedad, es realmente necesario; el tiempo es oro.

El autor es egresado de la facultad de humanidades, (Comunicación Social) UCE y culmina en la actualidad los trabajos para egresar de la facultad de ciencias jurídicas, UCE