Por: Luis Eduardo Díaz Franjul / eduardofranjul@yahoo.com
El Dr. Enrique Rojas, psiquiatra, catedrático español y Director del Instituto Español de Investigaciones Psiquiátricas, también escribe para la revista Ritmo Social del Listín Diario, donde publicó “El desengaño de la modernidad” (9/3/2013). En lo que concierne a la educación, en sentido general, cito a continuación algunos de sus párrafos: (1) “Sin embargo, la verdadera formación del ser humano no es algo que se construye sobre la marcha y sobre cimientos etéreos. Hacen falta valores sólidos como base y es necesario un esfuerzo y una cantidad de tiempo para adquirir una educación consistente”. (2) “Por medio de estos valores (refiere los valores morales en que se basa la educación y todos los aspectos superiores del ser humano) la inteligencia se pone al servicio de la voluntad y es posible entonces alcanzar el bien que conduce a la felicidad”.
En la Era de Trujillo (1930-1961) podría decirse que hubo una estrecha relación entre educación, moralidad y respeto que armonizaba con el hogar y la sociedad. La moralidad y el respeto deben estar presente en todo proceso educativo conjuntamente con la formación del maestro y un desempeño estudiantil que culmine con éxito en la universidad, de ser el caso; pero además para enfrentar los retos del impredecible destino, la toma de decisiones y la búsqueda de soluciones apegadas a lo ético. Pero no todo el mundo pasa por ese proceso, si es que nos enfrascamos en un análisis comparativo del desempeño estudiantil en dictadura y democracia para saber “por quién doblan las campanas” o hacia donde sopla el viento. Fuera del nivel de felicidad alcanzado por el ser humano, o según su punto de vista, las desviaciones morales complican las cosas en el mundo. Según el dicho “No solo de pan vive el hombre” evidencia una estrecha relación entre el grado de felicidad y una dosis de moralidad. A partir de ahí resaltan falsos valores que dan sentido a la felicidad en términos materiales…hasta que suceda algo en vía contraria que la convierta en un martirio. Por eso no es de extrañar que mucha gente base su felicitad en lo material y la vanidad, entre otros parámetros, lo que da sentido al “desengaño de la modernidad”, título del trabajo del Dr. Enrique Rojas.
Sin embargo, es tal el desastre educativo en República Dominicana que de 5,500 planteles escolares públicos y privados, un l.4% de 2.5 millones de estudiantes aprobó los exámenes de nivel educacional (Pruebas Nacionales) y un 98.6% los reprobó. Según el Informe FUNPEN de 2012: 1) Del sistema educativo dominicano están saliendo perfectos analfabetos funcionales, y 2) Últimos lugares en Olimpíadas Iberoamericanas y Centroamericanas del Caribe de Matemáticas. Esto es inconcebible ante una asignación presupuestaria que partiendo de 2011 era de RD$18,000 millones en Educación Básica, RD$3,551 millones en Educación Media, y RD$747.0 millones en Educación Inicial. Y para justificar un aumento del 1.86% (2011) del PIB al 4.0% (2013) para la educación hay figuras públicas/políticas que utilizando la terminología “insuficiencia presupuestaria y carencias con que se maneja la educación pública para ponerla en sintonía con los objetivos del milenio”, queda implícito, es decir, dejan el campo libre…al aumento salarial de los maestros, como en el caso actual.
Según la Junta Central Electoral (JCE) unos 2,565 empleados públicos eran candidatos a las elecciones del 2010, de los cuales 1,257 (49%) trabajaban en el Ministro de Educación. La Asociación Dominicana de Profesores (ADP), gremio donde también se hace carrera política, demanda un aumento salarial de 100% para los profesores. El Ministerio de Educación ofrece un 20% de aumento dentro de un racimo que va de RD$15,000 a RD$19,000 a RD$33,000 hasta RD$46,000, más incentivos por antigüedad y titulación que los profesores actuales no perciben. Dentro de los próximos 4 años se piensa destinar RD$15,000 millones adicionales para ofrecer cursos de formación continua…pero sujetando el aumento salarial a que los docentes pasen a prestar servicios en jornada completa, de modo que ninguno queda con remuneración de media jornada.
A la ADP no le gusta eso porque, según ellos, no hay “correspondencia biunívoca” entre el aumento salarial del 20% y el costo de la canasta básica y los niveles de inflación, es decir, con la boca. Yo me pregunto si la ADP se ha puesto a pensar en la boca de los padres de alumnos, quienes a lo mejor no tienen un salario de RD$8,972 mensuales, o RD$10,796, si es que los maestros aceptan el “complaciente” ofrecimiento del Ministerio de Educación, un aumento que también genera inflación. Decimos esto por la siguiente realidad: EL ESTADO EN DEMOCRACIA TAMBIEN LO COMPONEN GREMIOS Y/O SINDICATOS QUE LE TUMBAN EL PULSO AL ESTADO POLITICO CON DEMANDAS SALARIALES, SIN PENSAR EN LAS CONSECUENCIAS DE LA INFLACION, DE LO QUE NO ESCAPA EL SECTOR PRIVADO EN LAS NEGOCIACIONES QUE AUSPICIA EL MINISTERIO DE TRABAJO ENTRE ESTE SECTOR Y LOS GREMIOS Y/O SINDICATOS, EN SENTIDO GENERAL.
Con relación al 4% para la educación, todo se derrumba y pervierte si no es en función de un solo objetivo: REVERTIR EL ORDEN EN EL RESULTADO DE LAS PRUEBAS NACIONALES, CADA AÑO. Esto se logra mediante una POLITICA DE CALIDAD dentro del sistema educativo. Esto también aplica a nivel de compras (materiales y equipos, libros, computadoras, alimentos, etc.) y obras de infraestructura. No se concibe, por ejemplo, que el Ministerio de Educación gaste sumas millonarias en alimentos para el Desayuno Escolar si a cada rato los estudiantes se intoxican, si los pupitres no sirven o si hay vicios de construcción en planteles escolares. La política de calidad no solo ayuda a corregir errores y evitar pérdidas en lo material sino que también contribuye con la mejoría administrativa y educativa en sentido general. Justificamos la política de calidad por tres razones: 1) Por el bienestar de las futuras generaciones, 2) Por la transparencia de un aumento de RD$44,934 millones para la educación en 2013, si lo comparamos con el presupuesto de 2011 (RD$39,055 millones), para un total de RD$83,989 millones en el presupuesto de 2013 dedicado a la educación, viéndolo de esta manera; y 3) Porque es preferible gastar RD$15,000 millones en los próximos 4 años en una política de calidad (o mucho, pero mucho menos de RD$3,750 millones por año) en vez de destinarlos a “cursos de formación continua” sin ninguna sustentación, solo como excusa del Ministerio de Educación para justificar un aumento salarial del 20%.
Sin una política de calidad resulta cuesta arriba monitorear el desempeño de la educación de parte de los sectores público y privado, o de la ciudadanía en general, para cambiar el resultado actual de las pruebas nacionales. Es una manera de saber cómo anda la educación inicial, media y básica cada año. Me identifico con el Presidente de la Academia Dominicana de la Lengua, Bruno Rosario Candelier, cuando dijo: “Eso del 4%, ¿ustedes creen que va a resolver el problema de la educación? No, eso no va a servir para nada, si no se va al fondo, y el fondo significa cambiar la metodología, buscar la manera de enseñar, de tal manera que produzca resultados visibles en términos de inquietudes, morales, éticas y espirituales”.
3 HAGA SU COMENTARIO:
Mire hombresito, usted para hacerse profesional por donde pasó? Digo si lo es, no fue por las mano de un profes@r. Cuanto usted gana? Mire deje de hablar disparate y pongase hacer lo que tiene que hacer.
la justicia de alli es un disparate y si soy profecional freco
y lo de cuanto gano preguntale ha tu abuela no me inporta quien seas tu si eres jues eres un charlatan y si eres policia un coruto mas q dejan inpune la delincuensia
Publicar un comentario