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Valerio Mateo Rosario
LA HAYA, Holanda - Johan Friso, el príncipe holandés que evitó ser el centro de atención y renunció a su posición en la línea de sucesión tras verse involucrado en un escándalo con su prometida, murió el lunes, 18 meses después de un accidente de esquí que dejó su cerebro gravemente dañado. Tenía 44 años.
La casa real dijo que el príncipe, conocido como Friso, murió de complicaciones por el accidente, sin dar más detalles. Dijo que nunca recuperó más que la "conciencia mínima".
Friso fue alcanzado por una avalancha mientras esquiaba fuera de pista en Lech, Austria, el 17 de febrero de 2012. Quedó sepultado bajo la nieve hasta que los rescatistas lo sacaron, inconsciente, 20 minutos más tarde. Fue resucitado en el lugar y trasladado a un hospital, pero permaneció en coma durante meses.
Friso, el segundo de los tres hijos del ex reina Beatriz, era conocido como el "príncipe brillante". Estudió en la Universidad de California en Berkeley, la Universidad Técnica de Delft y la Universidad Erasmus en Rotterdam. Se graduó cum laude en ingeniería y economía de las universidades holandesas. Más tarde estudió una maestría en la prestigiosa escuela de negocios INSEAD de Francia.
Sin embargo, el acto central de su vida como real fue cuando renunció a su derecho al trono para casarse con la holandesa Mabel Wisse Smit en una boda no sancionada por el gobierno.
La pareja anunció su relación en 2002 y se comprometió en 2003. Wisse Smit trabajaba para el Instituto de Sociedad Abierta de George Soros y durante mucho tiempo la reina la consideró una nuera ideal. Sin embargo, durante la investigación de antecedentes para incorporarse a la casa real, la pareja decidió no revelar el alcance de una amistad que ella tuvo mientras era estudiante universitaria.
El amigo en cuestión: el narcotraficante Klaas Bruinsma, que más tarde se convirtió en uno de los criminales más infames del país y murió en un enfrentamiento entre bandas.
Wisse Smit niega haber tenido cualquier relación romántica con Bruinsma, y ha dicho que ella no sabía quién era él en ese momento. Sin embargo, conforme se filtraron detalles sobre su relación a la prensa holandesa, el entonces primer ministro, Jan Peter Balkenende, dijo que estaba claro que la pareja había retenido información y que no iba a proponer la legislación necesaria para que el parlamento aprobara el ingreso de Wisse Smit a la casa real.
Así que el príncipe decidió casarse con Wisse Smit y dedicarse a la vida profesional.
Luego de que el príncipe se graduó, trabajó como consultor en McKinsey & Co en Ámsterdam y posteriormente en la división de banca de inversión de Goldman Sachs en Londres, de la cual llegó a ser vicepresidente.
Después de su matrimonio, Friso formó parte de varios consejos de supervisión, trabajó para organizaciones de caridad y ayudó a fundar una compañía aérea de bajo coste. En 2011 dejó el cargo de director gerente de la firma de inversión Wolfensohn & Company para convertirse en el director financiero de Urenco, el consorcio europeo de enriquecimiento de uranio.
Friso procreó dos hijas con la princesa Mabel: Luana y Zaria.
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