8:57 a. m.
Valerio Mateo Rosario
9:15 AM.
NUEVA YORK._ La familia del ex luchador dominicano John Collado muerto a manos de un encubierto antinarcóticos la semana pasada en el Alto Manhattan, anunciaron una demanda millonaria contra la ciudad y el Departamento de Policía (NYPD) por homicidio culposo aunque no revelaron el monto de la reclamación. La uniformada mantiene su versión de que Collado, fue abatido por el oficial que arrestaba a un presunto narcotraficante también dominicano, Rangel Batista de quien la víctima creyó que estaba siendo atracado e intervino porque eran vecinos y amigos y se conocían desde hacía muchos años y le echó una llave de lucha libre al policía.
La uniformada dijo que en la investigación encubierta también apareció otro supuesto narco, Carlos Tejada, quien huyó de la escena y fue detenido momentos después en un matorral cercano con un bulto conteniendo una significativa cantidad de marihuana y otras drogas.
Los parientes, testigos e imágenes de cámaras de seguridad en el área de la avenida Post, donde ocurrió el hecho desmienten el informe policial, según el abogado de los parientes de Collado Patrick Brackley, quien la semana pasada en una conferencia de prensa reveló detalles del caso que desmienten a la uniformada.
Collado de 43 años de edad y abuelo de un niño de 2 años de edad, recibió un balazo en el abdomen y murió varias horas después en el hospital. Los testigos dicen que el agente no tuvo ninguna justificación para disparar contra el dominicano, quien en ningún momento “llaveó” al oficial.
Los demandantes insisten en que el ex luchador, “nunca tocó el policía” y el defensor de la víctima ha reiterado que las investigaciones hechas por su oficina se contraponen totalmente a lo dicho por el portavoz del NYPD Paul Brown, alegando “defensa propia” en la conducta de la policía.
Varias vigilias y micro mítines se han estado realizando en el vecindario, escena del crimen, mientras los líderes políticos exigen una investigación amplia y clara sobre la tragedia. Dominicanos y dominicanas portando carteles que rezan “paremos la brutalidad policial”, se han hecho presentes en las protestas, en tanto, otros cientos han estado frente a un altar improvisado que tributa recuerdo a Collado.
“No vamos a descansar hasta que su nombre sea honrado”, dijo Juana Cruz, amiga desde la infancia de Collado. Una carta de la oficina del abogado de la víctima fue colocada también en el altar y en la que se pide a testigos que presenciaron el hecho, comunicarse con el bufete de Bracley.
Pablo Collado, hermano mayor del ex luchador calificó a la víctima como “el chico bueno de la familia”. El difunto era uno de siete hermanos y hermanas. Ayer lunes se llevó a cabo otra vigilia de protesta luego que Collado fuera sepultado en un cementerio de El Bronx.
Una marcha desde la esquina en la que cayó Collado hasta el cuartel 34, ha sido convocada para el domingo por los familiares y activistas comunitarios en protesta por la muerte. Araiza Cruz, amiga de la familia explicó que es muy difícil reunir a todos los parientes, mientras la familia esté de luto.
Juana Cruz, quien reside en la avenida Post por más de 30 años, pidió la participación de la comunidad en la marcha, diciendo que “tenemos que estar unidos porque necesitamos el apoyo de todos. No podemos hacer esto solos”.
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