10:47 a. m.
Valerio Mateo Rosario
11:20 AM.
SANTIAGO.- La demolición de la casa club de la Villa Olímpica para en su lugar levantar la parroquia Santa Cecilia enfrentó a propietarios de apartamentos que se oponen a quedar sin espacio recreativo y a cientos de feligreses que se concentraron en el lugar en apoyo a la obra.
El sacerdote William Almonte y los parroquianos se concentraron con pancartas y entonando canciones religiosas, mientras empleados de Obras Públicas terminaban de destruir el viejo espacio, que según la iglesia era tomado por consumidores de drogas debido a que estaba abandonado.
Agentes policiales fueron apostados con armas largas para apoyar que la demolición se hiciera sin interrupciones ante la amenaza del sector que rechaza la obra.
El religioso presentó los documentos del Instituto Nacional de la Vivienda (INVI) que ceden el espacio para la construcción de la iglesia.
La vieja parroquia además de contar con un espacio pequeño y estrecho, los delincuentes han robado en unas cinco ocasiones.
Jóvenes y ancianos entonando canciones como: “alabaré a mi señor”, o lanzando consignas a favor de la paz y la tranquilidad en la zona, apoyaron la causa de la iglesia y critican a los residentes de la Villa Olímpica que se oponen a la obra.
La señora Michell Vargas, propietaria de uno de los apartamentos se quejó de que la iglesia inició la demolición de la casa club en horas de la madrugada.
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